Fin de semana de bodorrio

Una nueva semana más aquí está el resumen de Pintochampion.

Empezando por el viernes en el que tras salir del curro fuí a Portu a comer y al acabar fui a la peluquería, a realizar los últimos retoques antes de la boda que teníamos el sábado. Acto seguido fuí a buscar a Itziar y tras dejar alguna cosa en casa, fuimos a hacer la compra que la nevera daba hasta pena la pobre. Nos entretuvimos bastante en el carrefour y nos dieron las 20.00. Mas tarde a casa a cenar donde preparamos una cena de picoteo con jamón, pavo, pate y queso provolone. No nos entretuvimos mucho por la noche ya que el sábado tocaba madrugar.

El sábado Itziar se levantó pronto para ir a la peluquería y yo de mientras me quede en casa con la aspiradora arreglando todo. Sobre las 10.00 volvió Itziar y tocaba chapa y pintura. Yo de mientras me vestí y arregle y sobre las 11.50 salimos de casa para coger el bus que venía a por nosotros a las 12.00. Allí en la parada nos esperaban el resto de invitados y alguno que llegó posteriormente. Llegamos a Zamudio donde teníamos la boda a las 12.40 y allí un tipo un poco malhumorado nos fue redirigiendo a sus anchas para ubicarnos en el lugar de la ceremonia. Ceremonia oficiada por un concejal de la localidad, breve y amena. Luego el amigo borde nos volvió a desplazar para presenciar el Aurresku y la dulzaina. Mientras comenzábamos con el refrigerio. A continuación llegó el momento curioso de la boda, por tradición zamorana, los novios tuvieron que ponerse a arar el campo. Muy gracioso, y todo un cuadro verlos hay con sus vestidos arando como si se tratase de dos bueyes. Lo siguiente fue el coctel, donde tomamos un zumo de piña con algo de champan y picoteamos unos pintxos mientras aguardabamos para las pertinentes fotos de rigor. Tras retratarnos todo guapos, llegó nuestro amigo el camarero "agradable" para redireccionarnos al restaurante. Degustamos un rico menu con jamón, pastelito de pescado con huevas de langostino, brocheta de pulpo, pastel de puerros y cabaracho, Rape y Solomillo (con sorbete entre medias) y de postre tarta. Y para bajar bien la comida un buen vinito y una copa al final. Para continuar la party el bailoteo (si si hasta baile y todo) en la calle y el photocall de disfraces muy graciosos. Estuvimos de farra hasta la 1.15 cuando el bus nos llevó hasta casa.

El domingo por la mañana fuimos a tomar algo y luego a casa de Itziar a comer. Por la tarde un paseillo por Barakaldo para ir bajando la comilona del día anterior. Por la noche preparamos unas fajitas y prontito para la cama que el lunes me tocaba juicio por el golpe que me dieron en el coche.