Esta vez para hablar de mis vacaciones en la isla canaria de Lanzarote.
A las 5:30 de la mañana del día 28 de agosto pusimos rumbo al aeropuerto, donde sobre las 7:30 teníamos que coger el vuelo dirección a Lanzarote. Llegamos a la isla tras un vuelo tranquilo sobre las 9:10 hora local. Luego cogimos el minibus que tenía que llevarnos rumbo al apartahotel, donde llegamos a las 10. Después de dejar todos los bártulos en el apartamento, fuimos a hacer la compra, donde adquirimos la comida para subsistir durante nuestra estancia. Mas tarde fuimos a la playita a tomar el sol y a bañarnos. Sobre las 14:00 tras terminar con unas pequeñas cosas mas que compramos fuimos a comer. Degustamos unas ricas papas arrugadas y un escalope. Mas tarde descubriríamos que los super de carne nanai, asi que iba a ser de las pocas carnes que nos tocaría catar. Por la tarde un poco de piscina y a la noche sandwich para cenar y a descansar que se había madrugado mucho.
El miércoles nos levantamos a las 9.00 ( si si las 9, porque la señorita Itziar puso el despertador a las 10, pero a las 10 hora peninsular). Tras desayunar, fuimos a recoger el coche que habíamos alquilado, un renault clio. Tras coger el vehículo y buscar una gasolinera donde llenamos el deposito, fuimos a las playas vírgenes del Papagayo. Unas playas preciosas donde disfrutamos de una mañana muy agradable. Por la tarde fuimos a ver el Mirador del Río desde batallamos contra el viento y la niebla, pudimos ver la isla de la Graciosa. Sobre las 17:00 fuimos a Arrecife capital de la isla, donde recorrimos un poco sus calles. Y ya sobre las 21.00 fuimos al hotel del vuelta a descansar.
El jueves nuevo día para recorrer la isla. Por la mañana fuimos a ver los Jameos del Agua, donde vimos los cangrejos albinos únicos en el mundo. Además vimos la piscina de Machado. Al salir de los Jameos, fuimos al jardín de Cactus. Un espectacular jardín que se encuentra lleno de diferentes especies de Cactus, algunas de ellas muy peculiares como alguno con forma lasciva o forma de cerebro. Por la tarde tras comer en Playa Blanca, pasamos la tarde en la playa de la localidad, disfrutando del sol y de sus aguas. Al Acabar unas fotos en la entrada del Timanfaya a donde acudiríamos al día siguiente, y a casa. Cenamos y salimos a dar una vuelta por el pueblo, donde descubrimos que la otra punta de Puerto del Carmen (lugar en que estabamos) poseía una zona de bares u comercios bastante amplia. Sobre la 1 nuevamente a casa y a descansar.
Continuara el resumen en un segundo capítulo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario