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jueves, 12 de octubre de 2017

Honeymoon 4:San Francisco

Siguiendo con el viaje continuo con la cuarta parada del mismo.

Nos levantamos pronto en Los Ángeles para dirigirnos hasta la agencia de alquiler de vehículos donde íbamos a coger un coche para ir tranquilamente hasta San Francisco. En principio el coche se retrasó un poco porque venía desde el aeropuerto (curioso que sabiendo que iba a cogerlo a las 8 a esa misma hora saliese del aeropuerto). Total que para hacer un poco de tiempo fuimos hasta el Staples Center que estaba cerca para sacar unas fotos y ver la tienda donde compramos algunas cosillas. Volvimos a la agencia y seguí sin estar el coche, con lo que ya algo mosqueados nos fuimos a desayunar y volvimos más tarde. Con 2 horas de retraso pero por fin llegó el coche, un Mustang color amarillo precioso y descapotable. Emprendimos la marcha rumbo a nuestra primera parada Malibú. Paramos en la playa de Zuma donde estuvimos un rato sacando fotos y dando un paseo al solecillo, para a continuación y con el coche descapotado recorrer la zona de mansiones antes de seguir la marcha. Cogimos la carretera 1 por la costa, hasta llegar a Santa Barbará donde paramos en su puerto a comer y luego a recorrer el Pier. No teníamos mucho tiempo porque aún quedaba mucha ruta hasta el destino con lo que el recorrido lo hicimos de forma breve. Por la carretera y ya anocheciendo llegamos hasta Pismo Point y paramos en un Outlet para ver las tiendas. De allí a San Francisco aún quedaba bastante trayecto con lo que decidimos salir de la carretera de la costa y proseguir por la autopista y aun así llegamos a San Francisco pasada la una de la mañana. Y cuál fue nuestra sorpresa que cuando fuimos a devolver el coche que la agencia estaba cerrada y no abrían hasta las 6.30. El coche estuvo muy bien fue una pasada conducirlo pero la agencia de alquiler se cubrió de gloria y no daban una. Total que aparcar el coche en la calle y a dejar las cosas en el hotel.




El siguiente día me tuve que levantar pronto para devolver el coche, allí lo deje y sin ganas de discutir  me volví para el hotel. Sobre las 8.30 desayunamos tranquilamente y cogimos el bus (indicar que vale 2,75$ y que más vale que lleves justo porque el conductor no da cambios. Eso sí un billete te vale para viajar todo el día) rumbo al Pier 33 donde teníamos cogido un ferry hasta la isla de Alcatraz. La verdad es que el día estaba fabuloso (todo despejado) y aunque algo fresco por la mañana se podía ir en la parte de fuera. No se tarda mucho en el barco y nada más llegar allí te dan una breve introducción antes de meterte en una sala donde con un video te cuentan la historia de la isla (desde que fue un bastión del ejército, pasando por la cárcel y la ocupación de los indios). El video dura unos 15 minutos y después sin perder mucho tiempo nos fuimos a hacer el tour por la penitenciaría. Entrabas por la zona de duchas y de allí te cogías tu audífono y a recorrer la cárcel al ritmo que te marcaban(algo rápido, con lo que de vez en cuando conviene parar la grabación y esperar para ver las cosas con más tranquilidad). Si hace un día despejado merece la pena las fotos de la ciudad desde las afueras de cárcel. El tour dura unas 2 horas y la verdad es que impacta ver la cárcel  escuchando las vivencias de los que habían estado allí. Sobre las 12.45 salimos de la isla de vuelta a San Francisco, donde nos dirigimos al conocido Pier 39, lugar donde se encuentran los leones marinos y un montón de restaurantes y tiendas de souvenirs. Comimos en el Hard Rock y de allí en bus hasta el Golden Gate. El puente es impresionante, coronando la salida de bahía y además, tuvimos suerte estaba despejado (normalmente por lo que dicen siempre suele tener algo de niebla). Lo cruzamos tranquilamente andando y parándonos a sacar fotos. Se tarda un rato pero merece la pena el paseíto. De allí y por la costa fuimos andando hacía al ciudad, sobre el mapa el recorrido era corto pero nada más lejos de la realidad tardamos bastante en encontrar una zona con casas. Preguntando a los autóctonos llegamos a la calle Lombard y de allí subimos hasta Hyde ( subiendo las empinadas calles de San Francisco, esas que has visto en las películas). Arriba del todo se encontraba la famosa calle con curvas en forma de S que se ve en muchas pelis y también se podía coger el famoso Cable Car (7$ por trayecto). Si vas a la ciudad no puedes no montarte en el Cable Car, todo un símbolo, que además te ayuda a subir y bajar las empinadas calles. Es curioso ver como lo manejan todo de forma manual y ver como pita para que coches y gente se aparte. Nuestro destino final fue Union Square donde estaba el hotel, tras dejar las cosas nos fuimos a cenar algo rápido y a descansar.






El siguiente día y con más tranquilidad fuimos a dar una vuelta por la ciudad, pasamos primero por China Town donde nos hicieron una entrevista para una página de Facebook y nos regalaron unas tarjetas monedero. De allí a ver el famoso edificio de Transamerica Pyramid y de la zona de negocios a Union Square y alrededores. Y acabamos en Ross, una tienda outlet donde había una colección de ropa a precios de ganga. Total que nos salió la vena consumista y compramos chamarras, ropa y algunos complementos. Nos tiramos buena parte de la mañana allí y tuvimos que volver al hotel a dejar las cosas antes de volver a Main Street para coger el bus a nuestro siguiente destino, las famosas Painted Ladies en Álamo Square. Se trata de unas casas de estilo Victoriano que han salido en muchas películas y series de renombre como por ejemplo “Padres Forzosos”. De allí fuimos hasta el barrio Haight-Ashbury, conocido como el barrio Hippie, donde comimos y visitamos sus tiendas de segunda mano y peculiaridades. Pretendía ir hasta Twin Peaks pero chispeaba y estaba nublado con lo que no se iba a ver nada así que tras un breve paso por el Castro (barrio cuna del movimiento LGTB) nos volvimos al centro. Por la noche fuimos a gastar las tarjetas al Pier39 donde cenamos en un In&Out, antes de retirarnos a pelearnos con las maletas que teníamos que preparar para ir a nuestro siguiente destino.




El último día en San Francisco (ya que el vuelo a Jamaica era a las 00.15 de la noche), se caracterizó por un día de compras en Marshalls y Burlington (dos mega tiendas outlet) y por disfrutar del ambiente de esta bonita ciudad. Recorrimos el centro andando, compramos Souvenirs en el Pier39, comimos en una típica hamburguesería americana y hasta nos tomamos una cerveza en un bar de por allí. Sobre las 20.30 se acabó nuestra estancia en la costa Oeste y emprendíamos rumbo al Caribe y la otra costa de USA.



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